Testigo atónito de un juicio surrealista

#lectoropinaCalellaCOM: Alejandro Mesa

Indignado. Asqueado. Incrédulo. Aunque se acercan, ninguno de estos adjetivos puede describir, ni siquiera todos juntos, como me siento ahora mismo.

Acabo de regresar de los tribunales de Arenys de Mar, donde fui a prestar declaración en calidad de testigo presencial en un juicio contra un joven magrebí acusado de robo con fuerza y lesiones menores.

Varias cosas saltan a mi atención desde el primer momento:

Todos los demandantes y testigos estábamos en tiempo y forma, a la hora especificada por el Tribunal. Pero no los acusados. Estos llegaron cuando quisieron, por su propio pie, y no es broma: directamente a la misma sala donde estábamos todos los testigos y demandantes! Tan anchos!

Cuando eres detenido por un supuesto robo con fuerza, puedes ir a la cárcel hasta el día del juicio excepto si te pagas la fianza. Si tan vulnerables son estos chicos, de donde sacaron el dinero para pagarla? Sería interesante saber quien financia a estos malhechores para que puedan continuar delinquiendo impunemente hasta tanto no haya juicio…

Llama la atención además el hecho de que estos jóvenes “vulnerables”, vestían prendas de ropa bastante caras de marcas reconocidas como Nike, y uno de ellos tenía un Iphone. Tan necesitados no creo que estaban tampoco…

En la sala de al lado, se estaba celebrando otro juicio contra 3 MENAS acusados de forzar y robar a un chico en plena estación del tren en Calella. Todos bien vestidos, muy animados charlando, en medio de la sala. El acusador, un chaval de unos 15 o 16 años, estaba aterrado, la madre enfadada y desesperada pidiendo protección para su hijo que no quería pasar enfrente de esos monstruos. Yo aluciné viendo semejante escena, hablé con la madre para intentar tranquilizarla, pero en vano, y entiendo a la señora. Si fuese yo el padre del chaval, estaría igual.

Pero lo mejorcito lo guardo para el final.

En el juicio, actuando en calidad de testigo, la letrada defensora, intentó hacerme una pregunta insidiosa, queriendo pintar como que nosotros estábamos intentando declarar en contra de esos delincuentes, por ser ellos magrebíes y nosotros racistas.

“Habéis tenido muchos problemas con la Bruna recientemente, verdad, porque esta llena de marroquíes?” Me pregunta, y le contesté que yo no tenía problemas con la Bruna, sino con la delincuencia. Si es abogada de oficio, lo que hace es un golpe bajo a la moral ciudadana queriendo hacer sentir culpable a la gente de bien jugando la carta racista. Si es una letrada pagada por alguna organización giliprogre o quién sabe si alguna mafia que controla a estos MENAS y el dinero que generan, pues bueno, qué mas puede esperarse.

Pero de los que sí esperaba más es de los encargados de hacer justicia, que llevan estos casos sensibles como si fueran multas de tránsito.

Increíble.